En este artículo exploraremos una de las preguntas más comunes en el mundo del cuidado de la piel: ¿Qué va primero, el serum o la bruma? Si eres amante de la belleza y te gusta cuidar tu piel, es fundamental entender el orden adecuado de aplicación de estos dos productos. Sigue leyendo para descubrir cómo maximizar los beneficios de tu rutina de cuidado facial y lograr una piel radiante y saludable.
Qué va primero la bruma o el sérum
Al momento de establecer una rutina de cuidado facial, es importante conocer el orden correcto de aplicación de los productos para obtener los mejores resultados. Dos productos populares en el cuidado de la piel son el sérum y la bruma, y es común preguntarse cuál debe aplicarse primero.
La respuesta es que el sérum debe aplicarse antes de la bruma. A continuación, te explicamos por qué:
- Sérum: El sérum es un producto concentrado con ingredientes activos que penetran profundamente en la piel y brindan beneficios específicos. Al aplicarlo primero, se asegura de que los ingredientes activos lleguen directamente a la piel sin obstáculos.
- Bruma: La bruma facial, por otro lado, es un producto refrescante que proporciona hidratación adicional a la piel. Se utiliza después del sérum para sellar la humedad y ayudar a que los ingredientes activos del sérum sean más efectivos.
Aplicar el sérum antes de la bruma permite que los ingredientes activos trabajen en la piel y luego sellarlos con la bruma para maximizar los beneficios. Además, este orden de aplicación ayuda a prevenir la dilución de los ingredientes activos del sérum, ya que la bruma puede contener agua u otros líquidos diluyentes.
Recuerda siempre leer las instrucciones y recomendaciones de uso de cada producto, ya que algunos sérum y brumas pueden tener indicaciones específicas sobre su orden de aplicación.
Cuál es el orden de los productos para la cara
A la hora de cuidar nuestra piel, es importante seguir un orden específico al aplicar los productos para obtener los mejores resultados. Uno de los dilemas más comunes es determinar qué va primero: ¿el serum o la bruma? A continuación, te explicamos cuál es el orden adecuado para aplicar estos dos productos en tu rutina de cuidado facial.
1. Limpieza facial
Antes de comenzar cualquier rutina de cuidado facial, es esencial limpiar adecuadamente la piel para eliminar impurezas, suciedad y restos de maquillaje. Utiliza un limpiador facial suave que se adapte a tu tipo de piel y enjuaga con agua tibia.
2. Tónico
Después de la limpieza, aplica un tónico facial para equilibrar el pH de la piel y prepararla para recibir los siguientes productos. El tónico ayuda a minimizar los poros y proporciona hidratación adicional.
3. Serum
El serum es un producto concentrado con ingredientes activos que penetran en las capas más profundas de la piel. Aplica el serum en pequeñas cantidades y masajea suavemente para que se absorba por completo. El serum proporciona beneficios específicos, como hidratación intensa, reducción de arrugas o luminosidad.
4. Bruma
Una vez que el serum se haya absorbido por completo, es el momento de aplicar la bruma facial. La bruma ayuda a refrescar, hidratar y calmar la piel. Pulveriza la bruma a una distancia adecuada del rostro y deja que se seque naturalmente.
5. Hidratante
Después de aplicar la bruma, es hora de sellar la hidratación con una crema hidratante. Elige una crema adecuada para tu tipo de piel y aplícala en movimientos circulares ascendentes hasta que se absorba por completo.
6. Protección solar
Si tu rutina de cuidado facial se realiza durante el día, es importante aplicar un protector solar para proteger la piel de los dañinos rayos UV. Elige un protector solar con un factor de protección adecuado para tu tipo de piel y aplícalo generosamente en todo el rostro.
Recuerda que cada piel es única, por lo que es importante adaptar la rutina de cuidado facial a tus necesidades específicas. Siguiendo este orden y utilizando los productos adecuados, lograrás una piel saludable y radiante.
El serum se aplica antes de la bruma para obtener mejores resultados. ¡Hasta la próxima!
